Solomillo Wellington

Solomillo Wellington. Las recetas

Solomillo Wellington con paté

Solomillo Wellington con paté

Este maridaje triunfante de solomillo de ternera, salteado con champiñones y paté de hígado, envuelto en crepes y luego dorado en hojaldre es perfecto para acompañarlo con una salsa de vino tinto.
Una comida deliciosa que lleva trabajo paro que merece la pena disfrutar.

INGREDIENTES

Para los champiñones:

  • 2 cucharadas de mantequilla punto pomada
  • 1 cucharada de aceite
  • 1 chalota finamente picada
  • 500 gramos de champiñones portobello picados
  • Sal y pimienta negra molida
  • 1 cucharada de perejil fresco finamente picado

Para la salsa:

  • 1,5 litros de caldo de carne
  • 250 ml de vino tiento
  • 2 cucharadas de mantequilla fría cortada en cubos
  • Sal y pimienta negra molida

Para los crepes:

  • 65 gr de harina
  • 1/8 de cucharadita de sal
  • 2 huevos grandes
  • 180 ml de leche
  • 2 cucharadas de mantequilla

Para la carne:

  • 1 filete de solomillo de ternera de kilo y medio
  • Sal y pimienta negra molida
  • 1 cucharadita de aceite
  • 100 gr de paté de hígado de pollo, casero o comprado
  • 500 gr de masa de hojaldre, casera o comprada
  • 1 huevo grande, ligeramente batido
  • 1 cucharadita de mantequilla, ablandada

PARA HACER LA RECETA

Comenzamos haciendo los champiñones. Calentamos la mantequilla y el aceite en una sartén a fuego lento. Incorporamos la chalota picada y la cocinamos revolviendo frecuentemente, hasta que esté transparente, de 3 a 4 minutos.

Añadimos los champiñones picados, mezclamos bien y aumentamos la temperatura a medio. Seguimos con la cocción hasta que los champiñones sean una mezcla negra (unos 15 minutos).

Sazonamos con sal y pimienta, agregamos el perejil, removemos y lo sacamos a un plato para que enfríe completamente.

Hacemos la salsa. Ponemos el caldo a hervir en una sartén hasta que se reduzca a medio litro aproximadamente, unos 20-25 minutos. Vertemos el vino y seguimos con la cocción hasta que el líquido se reduzca de nuevo, unos 5 minutos.
Sazonamos con sal y pimienta y lo mantenemos en caliente hasta que vayamos a servir.

Ahora hacemos el crepe. En un bol grande, mezclamos la harina y la sal. Hacemos un hueco en el centro en el que añadimos los huevos y 60 ml de leche. Mezclamos todos los ingredientes lentamente y vamos incorporando poco a poco la leche hasta que se forme una masa suave.

Derretimos la mantequilla en una sartén grande a fuego medio-bajo, y la extendemos por toda la base. Aumentamos el calor a medio-alto y vertemos la mezcla en la sartén hasta cubrir la base completamente.

Dejamos que se cocine hasta que esté hecho por la parte de abajo, luego le damos la vuelta y lo cocinamos por el otro lado hasta que esté ligeramente dorado.
Ponemos el crepe a un plato para que enfríe. Si la sartén no es muy grande, podemos hacer uno, dos o tres crepes.

Para montar el solomillo. Sacamos la carne de la nevera aproximadamente una hora antes de cocinarla. Secamos la carne y la sazonamos con sal y pimienta.
Calentamos el aceite a fuego alto hasta que esté bien caliente.

Doramos la carne hasta que esté uniformemente marrón (unos 2-3 minutos por cada lado). Sacamos la carne y la ponemos en una bandeja para el horno.

Por otro lado, mezclamos el paté con los champiñones hasta formar una pasta suave.

Ponemos los crepes sobre una superficie limpia hasta formar un cuadrado de aproximadamente 33 x 33 cm. Untamos la mezcla de paté sobre los crepes y lo extendemos.
Colocamos el solomillo en el centro de los crepes y cuidadosamente envolvemos la carne dándole forma (si es necesario, cortamos el crepe de los extremos).

Sobre una superficie ligeramente enharinada, estiramos la masa de hojaldre en un rectángulo de 33 x 40 cm. Pasamos la carne envuelta al centro de la masa de hojaldre y la enrollamos, alisando hacia fuera cualquier bolsa de aire.

Untamos con un pincel el huevo batido sobre la masa de hojaldre.
Colocamos la carne en una bandeja para horno antiadherente, con la costura hacia abajo.
Lo metemos en la nevera por lo menos durante 15 minutos.

Calentamos el horno a 240 ºC.
Volvemos a untar el huevo sobre la masa y marcamos la superficie con líneas diagonales, teniendo cuidado de no cortar completamente a través de la masa.

Metemos la carne en el horno, bajamos la temperatura a 220ºc y horneamos durante 10 minutos.
Después bajamos la temperatura a 200 ºC y horneamos durante 20-25 minutos.

Sacamos la carne del horno y la dejamos enfriar en una tabla de cortar durante 10 minutos.

Mientras tanto, terminamos la salsa: calentamos la salsa en una sartén a fuego medio. Cuando comience a hervir, reducimos el fuego a bajo y batimos. Sazonamos con sal y pimienta negra.

Cortamos la carne en rodajas y servimos por encima con la salsa.

Notas:

No tienes que hacer todos los pasos el mismo día. Puedes adelantar el trabajo en varios días.
2 días antes puedes hacer los champiñones, 1 día antes puedes hacer la salsa y los crepes.